Acaba de terminar en Santiago de Chile la cumbre entre la
Celac y la Unión Europea. Si esta cumbre hubiera tenido lugar una
década atrás, otros hubieran sido los términos de la discusión y muy
otras las “verdades” ofrecidas a una Latinoamérica desahuciada y
absolutamente atrapada en las redes del neoliberalismo. Vasallaje,
sometimiento, pérdida de soberanía, acrecentamiento de la
desindustrialización y de la extranjerización de la economía,
multiplicación de la desigualdad y ampliación de la brecha entre ricos y
pobres, desconfianza y competencia entre los distintos países de la
región para tratar, cada uno, de alcanzar sus propios acuerdos
“salvadores” con Estados Unidos o con la Unión Europea, crecimiento
exponencial de la indigencia y la pobreza. Escenario, en fin, de una
ideología hegemónica que recorrió, como la peste, América latina y
ofreció la panacea de la economía global de mercado con sus exigencias
de aperturismos absolutos y con su tachadura, como el mal a derrotar, de
cualquier forma de proteccionismo (vale la pena recordar que cuando se
le ofrecían, vía FMI y Banco Mundial, estas alternativas de hierro a
nuestros países desconcertados y en crisis, en el llamado Primer Mundo
se mantenían a rajatabla las políticas proteccionistas, especialmente en
el ámbito de la agricultura).
CONTINÚA:
http://veintitres.infonews.com/nota-6176-politica-Cumbre-Celac-UE-el-espejo-invertido.html
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